Con lo que me gusta el chocolate blanco y el gusto que le he cogido a preparar panna cotta (la última, una panna cotta de café), es raro que no se me ocurriera antes preparar panna cotta de chocolate blanco con mermelada de frambuesa. Una combinación delicada y sorprendente perfecta para todo tipo de veladas.
Ingredientes para 4-6 personas
- 600ml de nata para montar, 150g de chocolate blanco para postres, 60 gramos de azúcar, 5 láminas de gelatina (7,5gr), mermelada de frambuesa
Elaboración
Como todas las panna cottas, empezamos poniendo la nata a calentar en un cazo a fuego medio. Añadimos también el azúcar. Por otro lado, hidratamos las hojas de gelatina en un cuenco con abundante agua fría.
Cuando la nata rompa a hervir, la retiramos del fuego y añadimos la gelatina escurrida. Incorporamos también el chocolate blanco, que previamente habremos derretido en el microondas o al baño maría. Removemos bien y repartimos la mezcla en vasos a nuestro gusto.
Finalmente, tapamos con papel film y enfriamos en la nevera durante al menos 4 horas. Luego servimos con un topping de mermelada de frambuesa y decorando con unas bolas crujientes de chocolate blanco.
Tiempo de elaboración | 30 minutos + 5 horas de nevera
Dificultad | Fácil
Degustación
Cómo me alegro de haber preparado esta receta de panna cotta de chocolate blanco con mermelada de frambuesa, me atrevería a decir que está incluso mejor que la panna cotta de de Nutella, que ya es decir, porque el sabor del chocolate blanco combinado con la mermelada es algo delicioso.
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