Ayer os hablaba de cuantificación desde el móvil gracias a Google Fit, la nueva app de los de Mountain View, y no han pasado ni 24 horas cuando toca hablar otra vez del dichoso término, aunque esta vez nos tenemos que ir a casa de la competencia directa, a Redmond, desde donde Microsoft pone en circulación su primer wearable, la Microsoft Band.
No va a quedar nadie sin medir sus constantes vitales ni sus ritmos de vida, porque, si ya teníamos a Google y a Apple preocupadas por este tema, cada una con su propia visión, hoy, era la empresa que dirige Satya Nadella la que, no sólo presentaba su pulsera cuantificadora; también la acompañaba de Microsoft Health, el servicio que se encargará de gestionar todos los datos que sobre nosotros recoja este nuevo gadget.
Pero vamos a lo que realmente nos importa: ¿qué es Microsoft Band y qué aporta a nuestra vida realmente? Porque, como casi todas estas pulseras, Band viene repleta de sensores para medir absolutamente todo lo medible sobre nosotros: GPS, sensor para nuestro ritmo cardiaco, acelerómetro, sensor de luz, temperatura, y algunos más, acompañados además de un micrófono.
Y es ahí, en ese micrófono donde encontramos una de las mayores diferencias con respecto a pulseras clónicas como la Samsung Gear Fit: la Band se conecta por Bluetooth no sólo con los teléfonos Lumia, también lo hace con los de Apple o con los Android, pero, si es uno de Microsoft (os recuerdo que la marca Nokia, bajo tal nombre, ha pasado a mejor vida), nos añade funcionalidades que funcionan conjuntamente con Cortana (el Siri de los de Redmond), pudiendo dictarle notas y recordatorios que quedarán almacenados en el móvil.
En cuanto al look de esta nueva pulsera, poco que destacar que no hayamos visto ya. Incluye una pantalla bastante generosa para lo habitual en estos dispositivos, y en ella se muestran los ya clásicos Tiles de Windows Phone, para permitirnos acceder a datos y funcionalidades de la pulsera. Además, en ella se nos pueden mostrar notificaciones (acompañadas por vibración), mensajes, correos, tuits… Así que, debe quedar claro que no estamos sólo ante una pulsera cuantificadora: estamos ante el híbrido perfecto entre éstas y los smartwatch.
Además, con la posibilidad de interactuar tanto con Android como con iOS, la Microsoft Band no se cierra puertas a nadie.
Lo más interesante es que, además de ofrecer esta enorme lista de posibilidades, el precio de este nuevo gadget no parece excesivamente caro, al menos si lo comparamos con los smartwatches, porque, desde hoy se puede por 199 dólares en Estados Unidos. A ver cómo se cotiza el cambio cuando llegue a España.
En fin, que al final, a los más techies no les va a quedar otra que ponerse en marcha y hacer deporte… aunque sólo sea por justificar la compra de un último caprichito tan apetecible como esta Microsoft Band.
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