El vínculo que existe entre un gato y una persona es algo único e inexplicable, no lo entiendes hasta que no has tenido uno, y para llegar a conectar con ellos debes respetarlos por encima de todo. No todo el mundo es capaz de llegar a tener una relación auténtica con un felino, su carácter solitario, individualistas e independiente lo hacen el animal perfecto para convivir con un escritor.
Truman Capote se pasaba la vida defendiendo a su minino del bulldog que tenía en casa y Murakami no puede vivir sin un felino que le haga compañía. Ezra Pound y Bukowski dedicaron poemas a estos animales que han hecho las delicias de novelistas, cuentistas y poetas. Pero hay más, aquí tienes una selección de 21 retratos de escritores célebres y sus gatitos, donde se intuye el amor y respeto que se profesan.
Jorge Luis Borges
Mítica fotografía donde vemos al gran Jorge Luis Borges, uno de los autores más destacados de la literatura del siglo XX y a Beppo, un gato blanco que tenía fama de irascible. Beppo era su fiel aunque irascible gato blanco, al que el escritor le escribió poemas.
Ray Bradbury
Ray Bradbury fue un escritor estadounidense, conocido por sus obras de carácter fantástico y ciencia ficción, como su hilarante 'Crónicas marcianas' y la novela distópica 'Fahrenheit 451'. Ray comenta sobre la capacidad creativa y los gatos:
“That’s the great secret of creativity. You treat ideas like cats: you make them follow you.” (Este es el gran secreto de la creatividad. Trata a las ideas como a los gatos: haz que te sigan).
—Ray Bradbury
Charles Bukowski
El escritor y poeta estadounidense Charles Bukowski, al que erróneamente se le ha asociado con los escritores de la Generación Beat, por sus grandes similitudes de estilo y actitud, y que hoy en día es considerado uno de los escritores más influyentes y símbolo del "realismo sucio" y la literatura independiente, escribió sobre los gatos:
"Caminan con una dignidad sorprendente, pueden dormir veinte horas al día, sin duda y sin remordimiento: estas criaturas son mis profesoras".
Y continua:
“Having a bunch of cats around is good. If you’re feeling bad, you just look at the cats, you’ll feel better, because they know that everything is, just as it is. There’s nothing to get excited about. They just know. They’re saviors. The more cats you have, the longer you live. If you have a hundred cats, you’ll live ten times longer than if you have ten. Someday this will be discovered, and people will have a thousand cats and live forever. It’s truly ridiculous.”
Charles dice de los gatos que tener un montón de gatos a tu alrededor es bueno, que solo observándolos te sientes mejor. Para él eran salvadores, llegando a decir:
"Cuantos más gatos tengan más vivirás. Si tienes un centenar de gatos, vivirás diez veces más que si tienes diez. Algún día esto será descubierto, y la gente tendrá mil gatos y vivirá para siempre. Es realmente ridículo."
William S. Burroughs
El novelista, ensayista y crítico social estadounidense, el responsable de renovar del lenguaje narrativo y una de las principales figuras de la Generación Beat, dice en "Gato encerrado":
"Soy el gato que camina solo. Y para mí todos los supermercados son lo mismo. El gato no ofrece servicios. El gato se ofrece a sí mismo. Por supuesto que quiere cuidado y refugio. No se compra al amor por nada. Como todas las criaturas puras, los gatos son prácticos."
Truman Capote
Este periodista y escritor estadounidense, conocido por "Desayuno en Tiffany's" y su novela-documento "A sangre fría", tenía dos gatos y un perro, generalmente solía salir en las fotos abrazado a los felinos, o defendiéndolos de su bulldog.
Julio Cortázar
El escritor argentino Julio Cortázar, uno de los autores más innovadores y originales de su tiempo, nombró a su gato T.W. Adorno, por el filósofo y sociólogo alemán. El escritor menciona a los gatos en varias de sus obras, entre ellas “Rayuela” y “El último Round”.
Novelas que destacan por usar una nueva forma de hacer literatura, rompiendo los moldes clásicos con narraciones que escapan de la linealidad temporal. Su obra sucede en la frontera entre lo real y lo fantástico, puro realismo mágico con toques surrealistas. Es en este paisaje donde aparecen personajes felinos, y en su vida real, en las fotos de su vida cotidiana, los gatos aparecían como si fueran íntimos amigos.
Philip K. Dick
K. Dick, el prolífico escritor y novelista estadounidense de ciencia ficción, dice de su propio gato:
“Willis, my tomcat, strides silently over the pages of that book, being important as he is, with his long golden twitching tail. Make them understand, he says to me, that animals are really that important right now. He says this, and then eats up all the food we had been warming for our baby. Some cats are far too pushy. The next thing he’ll want to do is write SF novels. I hope he does. None of them will sell.”—Philip K. Dick
("Willis, mi gato, camina en silencio sobre las páginas de ese libro, siendo importante como es, con su larga cola con motas doradas. Hacerles entender, me dice, que los animales son realmente muy importantes en estos momentos. Dice esto y, a continuación, se come toda la comida que había estado calentando para nuestro bebé. Algunos gatos son demasiado agresivos. La siguiente cosa que querrá hacer es escribir novelas de ciencia ficción. Espero que lo haga. Ninguno de ellos va a vender.")
Ernest Hemingway
El escritor y periodista estadounidense Ernest Hemingway profesaba un cariño muy sincero a los felinos, su amor a los gatos es tan conocido que la periodista estadounidense Carlene Fredericka Brennen decidió escribir el libro “Los gatos de Hemingway”, en el que narra su relación con estos animales.
“A cat has absolute emotional honesty: human beings, for one reason or another, may hide their feelings, but a cat does not.” (Un gato es absolutamente honesto emocionalmente: los seres humanos, por una razón u otra, pueden ocultar sus sentimientos, pero un gato no lo hace.)
—Ernest Hemingway
Hermann Hesse
El Nobel de literatura (1946), y pintor alemán Hermann Hesse siempre sintió una llamativa adoración por los gatos, era feliz cuando cargaba a su gato. Cuentan que se llamaba Lowe. Era muy inquieto, así que el escritor pasaba sus ratos libres persiguiéndolo por su casa.
Aldous Huxley
Considerado uno de los más importantes representantes del pensamiento moderno, conocido por su novela de ciencia ficción "Un mundo feliz" donde retrata precisamente todo lo contrario, a un mundo distópico. Este gran pensador dice de los gatos:
“‘My young friend,’ I said, ‘if you want to be a psychological novelist and write about human beings, the best thing you can do is to keep a pair of cats.’” ('Mi joven amigo' le dije, 'si quieres ser un novelista psicológico y escribir sobre los seres humanos, la mejor cosa que puedes hacer es llevarte un par de gatos'.)
—Aldous Huxley
Neil Gaiman
Este autor inglés de historietas y escritor de novela fantástica, conocido por la serie de cómics 'The Sandman' y 'Coraline'. Tiene varios gatos de los cuales habla en su blog, protagonizan sus historias y por los cuales siente una profunda admiración.
“‘Name the different kinds of people,’ said Miss Lupescu. ‘Now.’ Bod thought for a moment. ‘The living,’ he said. ‘Er. The dead.’ He stopped. Then, ‘… Cats?’ he offered, uncertainly.” ("'Nombre los diferentes tipos de personas', dijo la señorita Lupescu. 'Ahora.' Bod pensó por un momento. 'La vida', dijo. 'Los muertos.' Se detuvo. Entonces, '... los gatos?' Contestó, con incertidumbre".)
—Neil Gaiman, The Graveyard Book
Edward Gorey
Acabo la lista con el oscuro y gran Edward Gorey fue un escritor y artista estadounidense reconocido por sus libros ilustrados en un tono macabro pero con cierto sentido del humor. En esta divertida foto encontramos a Edward Gorey echándose una siesta con sus amados gatos.
Lord Byron tuvo cinco gatos que llegaron a viajar con él, entre ellos destaco a Beppo, cuyo nombre fue recogido por Borges para bautizar al suyo, originalmente llamado Pepo. Charlotte & Emily Brontë tuvieron un gato llamado Tiger que jugaba con el pie de Emily mientras ella escribía "Wuthering Heigts".
Cuentan que el gato de Jean-Paul Sartre se llamaba Nada, un nombre que se ajustaba muy bien al existencialismo de su dueño. Mark Twain comentó sobre estos felinos que si se cruzaban gatos con personas, sin duda mejoraría la especie humana, pero empeoraría a los gatos.
Parece ser que no pueden vivir los unos sin los otros... Como compañera de piso de mi gatita Rita, corroboro todo lo que dicen de sus gatos, son tiernos, dulces, sinceros, honestos y libres.
Vía | 10 artistas con sus gatos, Los escritores y sus gatos y 16 Famous Writers and their Cats. En Trendencias Lifestyle | Hilarantes imágenes de gatos extrañamente sentados