En todas las ciudades hay establecimientos emblemáticos que los mayores recuerdan y de los que los jóvenes seguro que hay oído hablar. Entre ellos están los antiguos ultramarinos hoy en día casi desaparecidos como tal y reconvertidos en establecimientos de otro tipo, muchos de ellos en cafés y restaurantes.
En el centro de Coruña, en el Cantón Pequeño, estaba el Ultramarinos Aniceto que era uno de esos lugares con encanto en los que se podía conseguir todo lo imaginable y lo inimaginable para cocinar y siempre de la mejor calidad. Ahora en su local nos encontramos con Marita Ron Heritage Café, que ocupa en realidad el edificio completo ofreciendo en las plantas superiores un espacio multifunción con un gran potencial.
La semana pasada precisamente pasé por allí para visitar una pop up store de decoración de cocinas, de la que he sacado algunas ideas interesantes que os contaré próximamente. El local está ahora decorado y ambientado para la Navidad y es posible que los mercadillos y ventas estén en su máximo apogeo ahora por la coincidencia con estas fechas.
Pero lo que es una realidad es que el edificio, antiguo, vintage no solo en estilo sino también en esencia, ofrece un gran potencial para la realización de todo tipo de eventos, para venta de artículos tanto nuevos como de segunda mano e incluso para exposiciones diversas.
Aunque me ha encantado el edificio, planta por planta por su potencial, hay que comentar que todavía hay muchas zonas que hay que rehabilitar para que realmente resulten funcionales. Algunos techos están muy estropeados y las paredes necesitan una mano de pintura urgente además de una limpieza a fondo de cerámicos y porcelánicos. Aunque es razonable que vayan poco a poco porque es un edificio grande y por tanto la reforma lenta y costosa.
Para la amplia mayoría lo más conocido del establecimiento es la cafetería, muy amplia y con varios ambientes, que tanto nos vale para tomar el café de la mañana, como el té de media tarde o una copita after work con los amigos.
En la cafetería nos encontramos con elementos que nos recuerdan lo que fue el antiguo ultramarinos en todo su esplendor, el mostrador con su antigua báscula y el suelo que es de esos que enamoran como podéis ver en la foto sobre estas líneas.
Además para deleite de todos el local cuenta también con una amplia terraza, en realidad podemos decir que son dos porque tiene zona de terraza a la entrada, junto a la calle y también hacia el fondo en lo que en algún momento habrá sido un patio interior. Las terrazas están cubiertas y bien acondicionadas para que podamos disfrutar de ellas también en invierno.
Sobran las recomendaciones porque la cafetería está siempre llena y con muy buen ambiente, pero si necesitáis local en Coruña para un evento, una presentación o una pop up store, tal vez os interese echar un vistazo a las estancias que ofrecen en las plantas altas de su edificio.
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