Estamos en verano, temporada de bodas porque muchas parejas prefieren casarse en esta época. Así que en Trendencias Lifestyle hemos pensado que os gustaría conocer todos los secretos sobre la organización de una boda y nadie mejor que Sira Antequera, Wedding Planner de Sí! Quiero, que diseña desde los inicios todos los aspectos de una boda: decoración, catering, iluminación, música, luna de miel... para explicarnos claramente cómo organizar una boda. Sin más preámbulos os dejo con la entrevista que creo que os va a encantar.
Sira Antequera. En primer lugar, tenemos que hacernos una pregunta: ¿Cómo queremos vivirla? Puedes estresarte y planearla como una carrera de obstáculos insalvables, con miles de millones de listas de cosas que hacer, o disfrutarla (siempre tendrás cosas que preparar, pocas si tienes Wedding Planner, más si lo hacéis solos), incluso con una actitud de fiesta. Nadie "necesita" casarse. Lo hacemos para celebrar que nos amamos, así que tras esta reflexión mantén tu energía focalizada en lo importante.
Si quieres vivir tu boda al máximo, trata de contar y asesorarte con una Wedding Planner. Cuando todavía estás en blanco es el mejor momento para ello, ya que al contar con la ayuda de una profesional desde el principio, te ahorras algunos dolores de cabeza. Cuando se empieza con la organización del enlace, muchos novios no saben por dónde empezar, pues existen muchos ítem imprescindibles para conseguir que la ceremonia y la fiesta sean inolvidables y divertidos. Es normal que los novios se encuentren perdidos en los inicios, por eso deben contar con una persona en la que confíen. Una Wedding Planner con años de experiencia sabe, controla, facilita, diseña y garantiza un buen resultado.
Me interesa la personalidad de mis parejas, conseguir volcarla en cada detalle.
S.A. Depende de algunos factores... En Sí! Quiero preparamos bodas increíbles incluso en diez días. Lo hemos hecho. Pero para que los novios disfruten cómodos cada paso, lo paladeen... lo ideal son unos seis u ocho meses. Ahora, si quieren una fecha fija, un sitio concreto o una iglesia muy solicitada, ese plazo puede subir hasta más de un año o, incluso, dos. Pero esto no quiere decir que sea lo normal, ni que durante ese lapso de tiempo tengan que estar constantemente dedicados a la boda. Para organizar una boda, lo importante es ser realista con la disponibilidad de la pareja (agenda de trabajo) y ver qué flexibilidad tienen para poder seleccionar y empezar a trabajar. En definitiva, mayor flexibilidad permite plazos más cortos.
S.A. A mí me gusta trabajar estilos muy personalizados. Los novios suelen pedir conceptos como "natural, elegante, con atención al detalle" que en sí mismos no son un estilo concreto, sino que hay que dotarlos de contenido. Y justamente ese es mi reto: encontrar el significado para cada pareja que oculta cada una de esas expresiones.
No me gustan las modas, no me interesa que alguien marque lo que sí o no puede llevarse. Creo que son cuadrículas comerciales muy poco apetecibles y a menudo lejos de la sensibilidad particular de cada uno. Me interesa la personalidad de mis parejas, conseguir volcarla en cada detalle. Para ello, me gusta mantener una mirada atemporal, pensando en que la boda pueda verse muchos años después y que seguirá gustando igual.
Además, creo que ese es uno de nuestros puntos fuertes en Sí! Quiero: Ninguna de nuestras bodas se parecen, responden a gustos, criterios estéticos y personalidades muy diferentes. Eso me emociona, me estimula y me encanta: Cada pareja nueva es un lienzo en blanco a descubrir y pintar.
Si gusta una terminación romántica, se puede hacer con muy buen gusto y un acabado delicado y elegante, sin caer en lo kitsch.
S.A. Las personas tienen distintos gustos, no creo que sea una cuestión de género. He tenido casi todo tipo de casos, tanto esperables como sorprendentes, por lo que trato de evitar generalizaciones. Me gusta conocer a mis parejas para hacer las cosas a su medida. Los hombres suelen huir de lo cursi, para mi también es una deformación de estilo. Si gusta una terminación romántica, se puede hacer con muy buen gusto y un acabado delicado y elegante, sin caer en lo kitsch.
S.A. En Sí! Quiero hacemos bodas en espacios muy especiales: fincas, villas, hoteles preciosos, haciendas, beach clubs... Lo importante es que tengan una singularidad que los defina. Que estén cuidados. Y si tienen cocina propia, que sea de gran calidad. A partir de ahí nosotros diseñamos y añadimos lo necesario para que la fiesta funcione con éxito, tenga el número de invitados que tenga.
Cualquier color es una buena opción, lo importante es cómo asociarlo, armonizarlo y combinarlo.
S.A. Cualquiera. Sobre todo los que les gusten a los novios y encajen con el espacio elegido (eso hay que valorarlo antes) y prever atmósferas, gamas o paletas de colores sobre la que trabajaremos, según sus gustos y la intención que se busque.
Yo he diseñado bodas con todo tipo de cromatismos. Del blanco al total black, pasando por dorados, rojos, rosas, naranjas... Cualquiera es una buena opción, lo importante es cómo asociarlo, armonizarlo y combinarlo. Todo un ejercicio de establecer relaciones de intención, ya que la belleza es relación. Es mas importante el equilibrio entre piezas que la belleza intrínseca y aislada de una sola de ellas. Yo trabajo los colores desde aspectos muy psicológicos, desde la personalidad de los novios y las sensaciones que quieren transmitir, hasta la influencia emotiva, en los estudios de los diferentes ambientes, acontecimientos y momentos.
A veces, hay parejas que piden un color concreto y el camino nos lleva a los que excluyen desde el principio. La preparación de una boda es un proceso de exploración, incluso psicológica de la pareja. Puede ser divertido y muy enriquecedor en muchos sentidos. Hace unos días me decía una pareja: "Sira qué fácil nos ponemos de acuerdo los dos cuando estamos contigo. En casa no es así". También la boda enseña claves que pueden ayudar a que terminen aprendiendo a decidir juntos. La preparación de la boda con la Wedding Planer indicada y profesionalmente capaz, también puede enseñar eso.
S.A. Si a los novios les apasiona un tema o un hilo argumental concreto, éste puede ser el centro temático de una boda, pero siempre sin excesos. Por ejemplo, acabamos de hacer una con inspiración japonesa espectacular. Sin embargo, nunca me gusta la idea del parque temático para una boda. La inspiración para la organización es fundamental, pero sin caer en lo obvio, en lo exagerado, ampuloso o kitsch.
La armonía para mí es la guía en todo momento. El objetivo que debe iluminar el sendero. Ante la duda, la pregunta mágica "¿cómo veré esto en veinte años?" Por ejemplo, personalmente me disgusta y desestimo las balas de paja y heno que se han visto en tantas bodas últimamente debido a la moda y en el peor de los sentidos parecen La casa de la Pradera. Otro caso es el de los sillones aislados en medio de la nada con un “trapillo” de crochet encima, o una mesa enorme para dulces con cupcakes o macarons para seis personas... Una boda no es un cumpleaños que se repite cada año. Debe ser una celebración generosa y abundante.
Como decía el sabio San Agustín: "Ama y cocina con verdadero derroche". Tu boda es un acontecimiento que se hace con la voluntad de que sea para toda la vida. Armonía, delicadeza y naturalidad son los mejores asesores de estilo. Pero hay que recordar que somos mediterráneos, nuestra cultura es celebrar, en primer lugar con la comida y la bebida. Eso sí, primero tiene que entrar por los ojos. Y como el presupuesto es muy importante para definir, mejor menos elementos de calidad, que muchos insuficientes. Si tenemos 150 invitados, no podemos poner una docena de cupcakes...
Hoy en día, las bodas son mucho mas divertidas, personales, detallistas y a medida.
S.A. El protocolo. Se ha adaptado a un estilo cada vez más natural, más relajado, más propenso al hedonismo y al disfrute real. Igualmente, la fotografía ha dado un vuelco increíble y ese es un gran catalizador de las emociones y el disfrute, porque la sociedad se ha acostumbrad a ver parejas risueñas, felices y “disfrutonas”. También, la alta gastronomía se ha extendido y ha llegado a todos los canales de hostelería, incluidas las bodas. Otro aspecto que ha cambiado en los últimos años es que socialmente, ya no es necesario casarse en España, pues desaparecieron las presiones de cualquier tipo. Ya no es requisito para nada, solo se casa el que lo desea, con el objetivo de celebrar.
Todos estos elementos juntos hacen que, hoy en día, las bodas sean mucho mas divertidas, personales, detallistas y a medida. Sobre todo esto se debe a que el gran diseño ha entrado de la mano de las Wedding Planners. En Sí! Quiero llevamos casi 15 años y hemos visto cambiar y madurar el sector de una manera espectacular.
S.A. El peor es no considerar el tiempo como factor principal a la hora de diseñar y planificar una boda. Es cierto que para los novios sin Wedding Planner es muy difícil, pero hacerlo bien es una de las claves del éxito. Lo visual (lo bonito que sea todo) o la fantástica comida que pongas se pueden diluir en nada si los tiempos están mal diseñados y hay una espera o malos flujos de movimiento de los invitados.
S.A. Verás, hacemos cosas muy personalizadas y lo que a uno le parece raro para otro es lo más normal... He tenido que convencer con mucho esfuerzo a algún novio de hacer una petición de mano con solitario de diamantes sin que lo supiera la novia y fingir la sorpresa del siglo. Hemos hecho bodas en barco, una reunión en la sala de espera de un especialista médico y, en muchas ocasiones, organizamos bodas privadas solo para los novios. La primera de este tipo fue uno de los retos más difíciles de mi carrera, ya que hacerla bien y mantener a los novios inmersos en una burbuja de emoción, sin ningún invitado, tiene su complejidad (Hoy en día son otra de nuestras especialidades).
También, hemos estado locas alimentando mariposas (para soltarlas en la ceremonia), de día y de noche, cuidando temperaturas y ciclos de hibernación o ralentización de metabolismo o hemos organizado las situaciones más sorprendentes con los perritos de los novios. Por ejemplo, esta misma semana, hemos proyectado un vídeo con el perrito de la novia mientras en el mismo momento entraba por sorpresa en la finca e iba directo hacia ella con un regalo muy especial en el cuello: la llave de un coche que le regalaban para la ocasión. En resumen, en Sí! Quiero pensamos que los sueños de los novios son el límite. Nuestra creatividad les acompaña.
Las imágenes de este artículo han sido realizadas con dirección y estilismo de Sira Antequera de Si! Quiero Wedding Planners, catering de Goyo Catering y flores de Virginia Florista en la Finca Llanos de Belvis en Marbella.
Más información | Sí! Quiero
Fotos | Nani de Pérez
En Trendencias Lifestyle | Viendo las bodas en Pazo do Tambre hasta los forever singles querrán casarse