Lee Jin Young, del estudio coreano de diseño I-clue, se ha inspirado en una ancestral tradición budista para crear Skull Tea Infuser, unos originales y prácticos mini cráneos de silicona para preparar el té.
Dice la leyenda que un monje budista en un pesado viaje se refugia en una cueva para pasar la noche, donde a oscuras y sin querer usa un cráneo como una taza para calmar su sed y pesadumbre. Por la mañana al despertar Wonhyo se da cuenta y queda sorprendido por lo sucedido, llegando a la epifanía de que la mente humana es capaz de transformar la percepción de nuestra realidad.
Lee Jin Young en lugar de jugar con la percepción lo usa como métafora evidente de lo sucedido, para recrear aquel momento, y para jugar con la idea de que las cosas no son lo que parecen o que son todo aquello que tu quieras que sean. Advirtiendo de que es mejor no juzgar por las apariencias.
Fabricado en corea y elaborado con silicona apta para el uso alimenticio, un material totalmente flexible y manipulable. Se abre por la mandíbula, por donde introducirás el té, además la pieza tiene una serie de diminutos orificios camuflados por el cráneo, por donde sale la infusión y se mezcla con el agua.
En la parte superior del cráneo hay una cadena que se conecta a una superficie circular que actúa como un contrapeso. La misma base circular te servirá además de plato donde colocar el infusor una vez hecho el té, para de esta manera no manchar la mesa con los líquidos que puedan quedar. A la que esté a la venta te informo rápidamente de los precios.
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