Que en Apple saben hacer las cosas es algo que muy pocos pondrán en duda. Te podrá gustar más o menos la marca de la manzana mordida, pero si les va tan bien, por algo será, ¿no? Así que, seguramente, puestos a gastar nuestro (poco) dinero en un teléfono Android, no sería mala idea confiarlo a alguien que sepa de buena tinta cómo se hacen las cosas en Cupertino.
Me refiero a John Sculley, directivo de Apple que tuvo el “honor” de ser el que lo despidió después de haber sido convencido por él mismo para que dejara de vender “agua azucarada” (trabajaba en Pepsi) y se incorporara a la empresa.
Cuando salí de Apple...
Pues bien, Sculley, que, duró diez años en la nómina de Apple y que ocupo el cargo que ahora ocupa Tim Cook (o sea, el de CEO de la compañía), ha decidido que la mejor forma de aprovechar sus conocimientos tecnológicos no es volver a Cupertino, sino plantarles cara en el terreno que mejor dominan: el de la telefonía.
Y ojo, porque lo hace con argumentos aplastantes: diseño cuidadísimo, no diremos que al nivel de Apple, al menos sin haber tenido uno de sus smartphones en la mano, y, sobre todo precios más que apetecibles, en algunos casos hasta cuatro veces por debajo de los iPhone.
La marca lleva por nombre Obi, o bueno, Obi Worldphone, aunque al final nos quedaremos sólo con lo primero, y viene con tres modelos bajo el brazo por ahora. Su diseño trae la firma del afamado estudio de San Francisco Ammunition, recordando muy mucho a los Nokia de hace unos años.
Tres modelos para dominarlos a todos... los mercados emergentes
Los tres modelos vienen con una versión propia de Android que, a juzgar por las imágenes que Obi ha distribuido a la prensa, al menos gráficamente luce igual de bien que el diseño de los teléfonos. Además, otra característica común a los tres es una pantalla táctil de 5 pulgadas, que no está nada mal para teléfonos con estos precios.
SJ15
Como modelo de entrada tenemos el SJ15 (sí, los nombres de los modelos se pueden mejorar, y mucho), con un procesador Mediatek 6580, un Gb de RAM, dos ranuras para SIM y cámaras de 8 y 5 megapíxeles. Como capacidad de almacenamiento cuenta con unos 16 Gb aunque no se nos quedarán cortos, ya que la ranura para tarjeta de memoria está entre sus características. Lo mejor de todo, su precio: 129 dólares, que no dolerán a nuestros bolsillos ni siquiera si se aplicara el cambio 1:1.
SF1 y SF1+
Por encima tenemos los SF1 y SF1+, que son básicamente el mismo smartphone pero con capacidades y RAM distintas. Hacen hincapié en el sonido, contando con Dolby Audio 7.1. Ambos con conectividad 4G, un procesador Snapdragon 615 y cámaras de 13 y 5 megapíxeles, el primero viene también con 16 Gb de memoria interna ampliables por tarjeta de memoria, y con 2 Gb de RAM, mientras el “plus” cuenta con 32 Gb más ranura para tarjeta y 3 Gb de RAM. Y tampoco vienen con el mismo precio, claro. El “pequeño” se venderá por 199 dólares y el “mayor” de la casa Obi, se podrá comprar por 249 dólares.
No se puede decir que no sean molones estos Obi, ¿no? Y más con esos precios. Es cierto que, por ahora, el mercado al que aspiran no es el nuestro, pero habrá que esperar que el señor Sculley se decida a ponerlos en circulación en Europa, para ver si le hacen daño o no a Apple y, sobre todo a otras marcas que tienen teléfonos mucho más asequibles. Y si no, si os enamoran realmente, seguro que podéis haceros con uno de ellos en algún viaje o encargándoselo a alguno de los miles de “españoles por el mundo” que hay en los últimos años…
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