Si me pinchan no sangro, queridos lectores de Trendencias Lifestyle. Resulta que yo me paso el día poniendo la campana extractora a tope y ventilando la cocina para que mi casa no huela a comida y otros se dedican a fabricar velas con olor a pollo frito para no echar nunca de menos el Kentucky Fried Chicken por lejos que esté de su hogar.
Lo más grave del asunto es que en un primer momento yo me fijé en las velas porque me gustaron las etiquetas que están hechas a mano y que me parecieron curiosas, incluso bonitas, hasta que me di cuenta de las propuestas de olores que incluían... desde luego, nunca se me habría ocurrido tal cosa.
Hay que decir que la colección de velas es una edición limitada con pocos ejemplares. Quiero pensar que su gracia radica en el homenaje que hacen al KFC más que en lo agradable que pueda tener su olor en si. Aunque por lo visto no solo huelen a pollo frito, hay tres modelos y alguno tiene un aroma con esencia de menta, que tal vez no esté tan mal.
Y ojo que con esto no estoy diciendo que a mi no me guste el pollo frito, al contrario, y aunque no voy mucho al Kentucky porque en donde yo vivo no hay, sí que voy de vez en cuando cuando visito ciudades que lo tienen, y me gusta... pero lo que me compro es el pollo... de olor a pollo, pero sin pollo, de eso nada.
Vía | Notcot Más información | Kentucky for Kentucky En Trendencias Lifestyle | Alitas de pollo a la barbacoa. Receta