Por el precio al que está actualmente la entrada del cine, podrías esperar un cóctel de bienvenida y algo para picar. O quizás me estoy pasando un poco, pero lo que desde luego no quieres son unos asientos pringosos que llevan ahí desde 1960, una sala con un sonido pésimo (o desde la que puedes oir la película que se proyecta en la sala de al lado) y una pantalla que es tan solo un poquito más grande que la de plasma de casa de tus padres. odo esto además, acentuado por ese microclima de los cines, que en verano deciden convertirse en Siberia. No quieres pagar por sufrir.
Con la idea de volver a lo auténtico y con un punto divertido y diferente nace en Londres Blackyard Cinema, en Camden Lock Place. Donde puedes ver éxitos de ayer, hoy y siempre (desde taquillazos hasta grandes clásicos) y disfrutar de buena comida y cocktails de excepción en un enclave único. ¿Te apuntas?
Pulp Fiction, Matrix, Dallas Buyers Club, Los Cazafantasmas o Crueles Intenciones son sólo algunas de las películas que proyectan en Blackyard Cinema, que además, surge de la idea de que ir al cine últimamente es una tragedia: ¿qué son esos nachos con queso más blandos que los fideos de la sopa de cocido? ¿Y ese perrito caliente reseco a seis o siete euros? ¡Venga ya! Normal que la gente prefiera ver las películas en sus casas.
Para que la gente vuelva a ir al cine, los de Blackyard Cinema tienen claro que deben ofrecer toda una experiencia: cine de verano, al aire libre, en un espacio alegre y cómodo, con hamacas y mantitas por si refresca: aquí podrás ver películas de culto, maratón zombie y cine familiar, acompañado además de buena comida ya que en su barbacoa preparan unas hamburguesas deliciosas y venden cervezas fresquitas.
Blackyard Cinema es un espacio para el entretenimiento y la diversión, ¿quién no ha querido levantarse a bailar durante la última canción de Grease? Aquí puedes. Pásatelo en grande y disfruta como si estuvieras en el salón de tu casa.
Hay tres tipos de entrada: sólo película, película y bebida y película, comida y bebida. Aunque si te lleva el olor a barbacoa y te arrepientes de haber comprado la primera entrada, siempre podrás darte un capricho. ¿Te animarás?
Más información | Blackyard Cinema
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