Floating Record: nunca imaginaste ver un tocadiscos así
Los discos de vinilo están tan de moda, si no más, como cuando eran casi lo único que teníamos para escuchar música. Pocos nos atrevemos a negar el encanto de poner un disco sobre el plato, y plantarle la aguja encima, para empezar a escuchar esa estática que tanto molestaba entonces y tanto echamos de menos ahora.
Aunque sí que me atrevo a decir, como amante de la era digital y poco purista que soy, que, todo ese encanto está muy bien, pero para un ratito; que eso de tener que buscar las canciones a contra luz, haciendo las cuentas de cuantas se quedan por un lado del brazo y por otro en caso de que tengas ganas de escuchar una en concreto es un poco engorro. Eso y los discos rayados, y tener que colocar una moneda sobre el brazo para evitar ese salto tan molesto, o lo de tener que limpiar con aquel invento aterciopelado los discos cada vez que los querías escuchar en condiciones. Todo parte de un entrañable ritual sí, pero que mejor se queda en el pasado para muchos…
O no, porque puede que con esta idea que os presentamos hoy, os den ganas de volver a la era del vinilo, y no precisamente por ese sonido tan cálido que tiene la música en ellos. Será más bien por cuestiones estéticas.
Porque, la idea que nos propone la firma Gramovox es exclusiva como poco, aunque lo cierto es que no son los primeros en intentarlo, ya lo hizo Sony en los 80. Su criatura se llama Floating Record y es un tocadiscos vertical, en el que el disco se coloca perpendicular al tocadiscos en lugar de plano, sobre él.
Las ventajas no son demasiadas sobre lo que ofrece un giradiscos clásico: se ahorra espacio, ya que la base es mucho más esbelta. Y el diseño puede ser la envidia de esa amiga que siempre te restriega que tiene las cosas más exclusivas, porque, además de lo peculiar de la posición del disco, el Floating Record viene acabado en maderas de primerísima calidad. Pero por lo demás ofrece lo mismo que un tocadiscos clásico.
Ni siquiera da esos problemas que te han venido a la cabeza nada más verlo: está preparado para que la aguja siga la superficie del disco, aunque éste esté en posición vertical, evitando así los saltos. Y las RPM tampoco son un problema ya que el Floating Record viene preparado para cambiar de 33 a 45 y viceversa con sólo mover la correa de silicona que hace girar el disco de un lugar a otro. Además, está pensado como un tocadiscos de gama alta, así que de calidad de sonido también va sobrado.
Como casi todo proyecto innovador que vemos últimamente, el Floating Record es una idea que busca financiación en Kickstarter. Se ofrece por una donación de 329 ó 349 dólares, dependiendo de la madera en que queráis que esté acabado: arce el modelo más barato y nogal el caro. Eso sí, podéis “apostar” tranquilos, que tener uno de ellos es sólo cuestión de tiempo, porque ya han pasado sobradamente la meta de dinero que se habían marcado. Así que, sólo te queda ir decidiendo en qué lugar de tu salón quedaría mejor.
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Más info | Floating Record en Kickstarter | Gramovox