Las tazas son de aquellos objetos que cuentan con fanáticos. Fanáticos que las coleccionan de diferentes tamaños, tipos, colores, materiales y diseños. Que las traen de sus viajes y las usan o exhiben.
Pero las tazas también pueden llegar a arruinar los muebles. Esto se debe a que el calor puede marcar la madera de una mesa y, si algo del líquido que contiene cae, puede llegar a dejar "dibujado" un círculo en el lugar. Pues pensando en estas dos cosas y en aportar un toque de original y funcional diseño a un objeto cotidiano es que Tigere Chiriga pensó en la Floating Mug.
Se trata ésta, como su nombre lo indica, de una taza flotante que, gracias a su forma, el sector que contiene el té o el café no entra en contacto con la mesa o encimera. Claro es que cuenta con el asa diseñada de tal manera que baja dando forma a una superficie de apoyo.
Un diseño que supo, de manera sencilla, dar solución a dos problemas con los que se presentan los usuarios a la hora de beber algo caliente: quemar o manchar el mueble donde se apoye la taza. Pero la pregunta es si la forma de este producto lo hace frágil. Según su diseñador no. Pues yo creo que con mucho cuidado al utilizarla y lavarla, no habrá que temer.
De este modo, el creativo envió a fabricar su taza flotante de porcelana, pero al ver el éxito de la misma, decidió colocar su diseño en la web KickStarter de manera de conseguir el dinero necesario como para fabricarla en serie y lanzarla a la venta. ¿Tendrá suerte?
Vía | Uncrate Más información | KickStarter