Cada vez que tienes que hacer un transbordo en un aeropuerto sabes que te va a tocar esperar. Por no hablar de todas esas cancelaciones, retrasos y otras indicaciones que suelen acompañar al número de nuestro vuelo en el temido panel de información.
Pero ¿en qué puedes emplear tantas horas en un aeropuerto? Vale, empiezas por las tiendas, la cafetería, pero el cansancio va apareciendo y al final es inevitable terminar echando una cabezadita en cualquier rincón soñando con una cama. O mejor aún, con una Sleepbox.
Sleepbox son unas pequeñas cabinas prefabricadas de 2 x 1,4 x 2,3 metros y una capacidad interior de 3,75 metros cúbicos en los que no falta de nada. La cama, unos estantes, una mesa para el ordenador, espacio para el equipaje, un televisor LCD, iluminación LED, e incluso están equipados con Wi-Fi, tomas de electricidad, ventilación y hasta un despertador para no liarla.
Existe la versión individual y la doble con literas, lo que permite abaratar el precio de su alquiler que va desde tan solo 15 minutos hasta varias horas. Tampoco es cuestión de quedarse a vivir allí.
Por sus reducidas dimensiones y los amplios espacios que suele haber en aeropuertos o grandes estaciones de tren o autobús, su ubicación no supondría un gran problema, pudiendo destinar una zona a la colocación de varios de estos pequeños hoteles móviles o disponerlas de forma individual distribuidas por las instalaciones.
El invento desarrollado por la empresa rusa Arch Group ya es una realidad en algunas ciudades como Moscú, Munich, París, Pekín y Bangkok. ¿Llegará alguna vez a nuestro país? Yo creo que es muy difícil resistirse a utilizarlas cuando sabes que tienes por delante todavía seis horas en tierra de nadie. Fin a los dolores de espalda tras quedarse dormido en un banco.
Vía | Designboom Web Oficial | Arch Group