Mira tú por donde, la de veces que habrás jurado en hebreo porque algún listo tiró su chicle al suelo en vez de a la papelera y éste acabó pegado en tu zapato y resulta que ahora a alguien se le ocurre la gracia de recurrir al tacón chicle para el diseño de sus zapatos.
Nos llegan desde Jerusalén (¿habrán oído tus juramentos?) de la mano del artista y diseñador Kobi Levi, que es lo mismo que hablar de los zapatos más extraños y originales del planeta.
Aunque seguro que has pensado que es uno de esos proyectos que jamás salen del laboratorio, los zapatos de cuero Chewing Gum ya están en la calle, pisando fuerte ante el grito de los que rodean: “oye, has pisado un chicle“. Lo sé, pero no es un chicle cualquiera, es de diseño y me lo ha hecho a mano Kobi Levi.