Los diseñadores de Black+Blum estaban hartos de encontrarse con dispensadores de cinta adhesiva que no cortaban o que no tenían el suficiente peso como para poner manejarlo con una sola mano. Puedes hacer la prueba de fijarte en ellos la próxima vez que vayas a unos grandes almacenes y verás como con el uso todos acaban rotos y están pegados con cinta adhesiva por todas partes. Al menos ésta no podía estar más cerca.
Así que no se cortaron un pelo y crearon el dispensador definitivo, el que nunca falla y que es capaz de sobrevivir a un terremoto o un ataque nuclear. Un tanque cuyo nombre es Heavy-Weight construido en aluminio y hierro y con un kilo de peso.
Solo faltaba incorporarle una cuchilla de alta calidad de acero inoxidable y que no se desgastara con el tiempo. Puedes llevártelo a casa por 46,50 euros. Ya tienes dispensador de cinta adhesiva para toda la vida.
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