¿Estarías seguro si fueras el tipo de la foto? Pues puedes relajarte todo lo que quieras, la cama flotante Fluttua de Lago es igual de segura que una cama convencional de cuatro patas. En realidad tiene truco porque va anclada a la pared y se apoya en una pata central en la zona del cabecero, pero a no ser que te agaches no lo vas a ver por lo que parece que está levitando.
Está disponible en versión rectangular y circular de diferentes tamaños, es regulable en altura (de 46 a 60 cm.) e incluso cuenta con una luz fluorescente debajo del somier para iluminar la habitación creando una atmosfera muy especial.
Dicen que han eliminado todo lo superficial dejando únicamente espacio al pensamiento y a los sueños. Yo sólo puedo decir que desde que la descubrí no sueño con otra cosa.
Su precio va aproximadamente desde los 2.000 euros de la versión rectángular a los 4.000 completamente redonda. Si aún así no te fías y no vas a poder dormir pensando en que te vas a estrellar contra el suelo, también han hecho una versión con cuatro patas de cristal transparente cuyo efecto es muy parecido.
¿No buscabas un dormitorio original? Eso sí, se te acabaron las excusas para no limpiar debajo de la cama.
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