El mundo del diseño más alternativo siempre se ha llevado especialmente bien con el concepto del reciclaje. No son pocos los creadores que dan vida a objetos que otros han desechado, descontextualizándolos por completo y dándoles una nueva funcionalidad.
Willem Heeffer ha tomado esta doctrina como guía a la hora de crear Drum Lamp, lámparas creadas a partir de tambores de lavadoras que han aterrizado en plantas de reciclaje, después de perder su utilidad original.

Estos tambores se tratan para librarlos de cualquier tipo de residuo y posteriormente, se recubren de una pintura especial que, en este caso, consigue seis tonos diferentes para elegir el que mejor combine con nuestra decoración: naranja, rosa, azul, verde, gris y blanco.
Sólo hace falta colgarla del techo con una sencilla instalación y tendremos una bonita luz gracias a las paredes satinadas de pequeños agujeritos del tambor. Puedes comprarte la que más te guste por 310 euros más gastos de envío.
Vía | Better living through design Sitio oficial | Willem Heeffer