Swatch ha sido responsable de poner el diseño en el panorama de los relojes a la altura de muchos bolsillos, dentro de una serie de rangos entre los cuales podemos elegir, según lo boyante que esté nuestra Visa ese día.
Para este verano, la marca suiza ha ideado una colección llena de color, con detalles geométricos que se combinan incluso con diseños infantiles o pedrería y brillos. Podemos encontrar además modelos a partir de unos 40 euros, si no queremos hacer un dispendio. Plástico, metal y cuarzo se fusionan en una colección que podemos combinar tanto con unos vaqueros como con un estilismo más festivo.
Personalmente, me quedo con dos diseños que representan este concepto a la perfección: Lace-Drops (el segundo de la imagen, empezando por la izquierda), perfecto para una noche especial, y el Ice At Noon (segundo empezando por la derecha), ideal para aportar un toque divertido al look de diario.
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