Nos referimos a colgar la bici en algunas de las paredes del dulce y confortable hogar. Ya sea en el salón o en el pasillo. Ya sea en el despacho o en el recibidor. Quizás en el lugar que un día fue ocupado por una obra de arte o una lámina de IKEA.
Y es que para muchos la bicicleta no es sólo un medio de transporte, es una pasión, un estilo de vida y un accesorio de moda. Si a esto sumamos las necesidades de espacio y los robos, se hace fácil entender que cada vez sea más normal subir a casa la amada bicicleta.
En Decoesfera nos mostraban hace unos meses el sencillo soporte para bicicletas ligeras que puedes ver en la imagen de arriba. Una delicada y minimalista solución en madera de roble. Tan sencilla que parece insuperable.
Michelangelo Two Bike Gravity Stand
Dicen que te llevarás una grata sorpresa al ver lo bien que funciona. Michelangelo Two Bike Gravity Stand es un soporte para dos bicicletas que no requiere hacer agujeros en la pared. Basta con apoyarlo y la gravedad hará el resto.
Cyclok
Cyclok es uno de los soportes más elegantes entre los que se ofrecen en material plástico. Además te permite disponer la bicicleta de forma vertical si lo prefieres. Sus atractivas formas curvas (y su gama de colores) han convertido a Cycloc en uno de los soportes preferidos de los que han decidido colgar la bici en la pared del salón.
Slit
Slit es una pieza con una puerta abatible que se integrará totalmente en la decoración de tu hogar proporcionando un soporte con un espacio auxiliar. Una propuesta de MIKILI, firma (100% Berlín) que se dedica en exclusiva a diseñar, fabricar y comercializar soportes de pared para las amadas bicicletas.
Hood
De Berlín a Londres. Allí tiene su sede el estudio de la firma Quarterre, también especializada en soportes para bicis. Una de sus propuestas es hood. Una pieza única de acero laminado que se ha diseñado para soportar la bici, el casco y la chaqueta. Incluye un revestimiento de cuero interior con la finalidad de no dañar el cuadro de la bici.