El lujo suele llevarse bastante bien con los relojes y las joyas, pero hoy nos vamos a quedar con la primera opción. Y concretamente, con una que lleva diez años siendo una de las referencias en este campo a base de premios y reconocimientos.
Bremont quizá no tenga la misma solera que otras casas de más fama, pero os garantizo que no tienen nada que envidiar a sus competidores. Uno de sus relojes más atractivos y con más posibilidades dentro de su gama es el Bremont Supermarine, un cronógrafo capaz de resistir las condiciones más adversas.
Con cinco modelos diferentes, todos tienen en común una esfera de 43 milímetros de diámetro y engastes fabricados en zafiro, el mismo material con el que han fabricado el cristal de la esfera. Así que podrás olvidarte de los rayones.
Aguantan ser sumergidos hasta 500 metros de profundidad, así que si eres aficionado al submarinismo, podrás llevarlo a todas partes. Cuatro de los Supermarine tienen la correa en goma negro de gran resistencia, mientras que hay uno que, mi personal favorito, está fabricado en azul. Podéis encontrarlos por unos 3,700 euros.