El encanto de las Polaroid es comparable al de las Lomo, cada una dentro de lo suyo, claro está. Pero las Polaroid han tenido siempre la ventaja de poder tener la foto de la mano de manera casi instantánea, siempre y cuando no pusieras todo el dedo en la imagen y la dejaras hecha un cromo. Como hacía yo.
Pero a nada que tengáis mejor mano que yo con las cámaras de fotos, seguramente os apetezca haceros con la última creación de la mítica marca. La Polaroid Z2300 es la hermana mayor de aquellas cámaras de los noventa, y sus prestaciones están a la altura del día de hoy.
Con 10 megapíxeles, este nuevo modelo incorpora una ventaja interesante respecto al resto de sus competidoras, y es que conserva la esencia de las primeras Polaroid: imprimir las imágenes según las capturamos. Pero además, también permite visualizarlas en su pantalla LCD de 3 pulgadas. Así, si te equivocas, no gastas "carrete" a lo tonto.
Es compacta, lo que significa que su tamaño es manejable - al contrario que el de aquellos armatostes de los ochenta - y no tienes que preocuparte por la tinta o cartuchos, ya que imprime con tecnología ZINK, Zero Ink, en la que es el papel el que permite la impresión. De esta manera, no generamos desecho alguno.
Su precio es de unos 130 euros al cambio, lo cual seguramente se eleve hasta los 150 euros si la logramos adquirir en territorio español.