Soy tan cafetero que creo que nunca podré tener una Nespresso, pues de momento no estoy dispuesto a pasarme el día haciendo mini cafés. ¿Qué como lo quiero? Siempre con hielo, aunque estemos a cero grados y el camarero me suelte lo de que no lo necesito, que se me va a congelar sólo.
¿Qué le voy a hacer? A partir de ahora, añadirle uno de estos enormes cubitos de hielo en forma de grano de café, en los que la gracia es olvidarte del agua y verter el contenido de la cafetera directamente sobre ellos.
Cada bandeja tiene ocho hielos y su precio no llega a los 6 euros. Dedicado a los que van diciendo por ahí que echarle hielo al café es aguarlo, por aguafiestas.
Vía | Laslentejas Más Información | Perpetual Kid