Apple lanzó ayer muchas novedades en su Keynote, y aunque las más destacadas son el nuevo iPad Air y el esperado anuncio definitivo del Mac Pro, mi oscuro objeto de deseo es el nuevo iPad Mini Retina, que aúna todo lo que me encantaba del iPad Mini con toda la potencia y resolución del iPad.
Ya desde que se lanzó venía tentándome el iPad Mini, ya que el iPad normal siempre me había parecido demasiado grande y pesado (aunque el nuevo iPad Air no llega al medio kilo), pero me resistí al impulso del early adopter que tuve con el iPad original, que se quedó desfasado muy pronto. Ahora va a ser complicado aguantarme las ganas de tener uno entre las manos.
Y es que el nuevo iPad Mini Retina añade a todas las bondades que ya tenía el iPad mini (7,9 pulgadas, 308g de peso, 72mm de espesor) la potencia y la pantalla de su hermano mayor el iPad Air, es decir, un procesador A7 de 64bits y una resolución de 2.048 x 1536, con una densidad de píxeles de 326 PPI, lo que viene a significar que es rápido y se ve de vicio.
Es verdad que para incluir estas mejoras ha tenido que engordar un poco --ahora pesa 331g y tiene 75mm de espesor-- pero sigue conservando unas medidas globales muy compactas (20x13,5cm), que lo hacen perfecto para llevarlo de viaje o incluso siempre encima. De hecho, estoy seguro de que si incorporara función de teléfono, muchos estarían encantados de usar el iPad Mini como phablet.
Más información | Apple En Applesfera | Nuevo iPad mini, con pantalla Retina y chip A7 En Trendencias Lifestyle | Lápiz analógico y lápiz digital, un dos en uno muy práctico