La estrategia del rapero Dr. Dre y de Jimmy Iovine con sus auriculares Beats (además de con su servicio musical online) ha sido brillante. Han conseguido que una marca de auriculares premium venda más por su diseño que por la calidad de su sonido.
Millones de jóvenes de todo el mundo han elegido los auriculares de esta marca (sobre todo los de diadema) para hacerlos parte de su look. Y esto, entre otras cosas, se ha traducido incluso en la compra de Beats por parte de Apple.
Con este panorama, era de esperar que otras marcas que también se dedican a los auriculares, pusieran su atención en el diseño de Beats y trataran de llevárselo a sus particulares “huertos”, como es el caso de la alemana Sennheiser.
Pero claro, Sennheiser, aunque también suele hacer gala de productos muy vistosos en cuanto a diseño (gamas Momentum On-Ear o HD 229), siempre ha ido en una línea más profesional en cuanto a aspecto y ha preferido tener su punto fuerte en la calidad de sonido, así que, con la llegada de la nueva gama Urbanite, las comparaciones, aunque odiosas, están servidas, y con razón.
Con esta nueva gama, Sennheiser nos propone unos auriculares de diadema que, ya desde su nombre ya nos dicen por donde van los tiros. El claro rival a batir es Beats, y sobre todo su gama Solo 2, aunque los Solo HD y los Studio también pueden salir perjudicados en esta liza.
Diseño: tú quieres que te miren
Y ¿qué diferencia o hace mejores a unos de otros? Pues bien; fijémonos en tres de sus características más importantes. En diseño, la primera de esas características en entrarnos por el ojo, la cosa sigue bien diferenciada. Los Beats siempre han lucido un estilo muy juvenil en la gama Solo, (que de hecho se puede considerar una de sus superventas), con formas muy definidas y cuidadas, y han añadido el toque de color con una gama muy extensa, que va desde el rosa chicle al negro más serio, pasando por otros cinco tonos más.
Los Sennheiser, por contra, siguen mostrando un diseño algo más serio, y profesional, con materiales, que, al menos a la vista, dan una apariencia de mayor calidad, con acero y cuero como verdaderos protagonistas. La diferencia con el resto de productos de la marca alemana la marca la gama de colores disponibles, con cinco posibilidades, también bastante más serias que las de Beats, aunque una de ellas, en rojo y azul, da algo más de variedad y se ve algo más juvenil.
Sonido: lo importante no está a la vista
La segunda característica a tener en cuenta nos entra por el oído, claro está. En cuanto a sonido, hay que decir que Beats, con unos auriculares claramente diseñados antes de la compra por parte de Apple, ha tratado de mejorar la calidad de sonido, y lo ha conseguido con respecto a la anterior generación de los Solo. La mejora en sus materiales, (que también repercute en el peso) redunda en una mayor calidad de sonido, aunque, como en anteriores ocasiones, los Solo 2 siguen demasiado enfocados en los bajos, haciendo que los medios y agudos se aprecien peor.
Lo Sennheiser, por contra, siguen haciendo gala de lo que mejor se les da, sonar bien, aunque no estamos hablando de unos auriculares de gama alta, y eso se nota. Su sonido no tiene el mejor balance, si bien es muy superior al de los Beats y todo el espectro sonoro queda mejor reflejado en los Urbanite.
Precio: ante todo, salud para tu bolsillo
Lo tercero que nos debe importar, aunque también puede ser lo primero, es lo nos sale del bolsillo: el dinero a desembolsar por los Urbanite y por los Solo 2. Y ahí tenemos un verdadero empate. Se ve que Sennheiser quería batalla. Algo menos de 200 dólares (o euros, ya sabéis, cosas de la paridad) para ambos modelos.
Beats Solo 2 vs Sennheiser Urbanite: empate técnico
El resto de ambas propuestas se queda en los detalles. Tanto unos como otros nos ofrecen un cable que se pude desconectar de los auriculares (por ambos extremos) y en él incluyen el obligado control remoto con micrófono para subir o bajar el volumen de nuestra música, contestar o colgar las llamadas o poder hablar por teléfono sin tener que sacar nuestro dispositivo del bolsillo.
Los materiales están muy cuidados en los dos casos, aunque en los Urbanite dan mayor sensación de calidad gracias al acero o a la tela empleada en la diadema, que frente al plástico en el que están casi íntegramente construidos los Solo, ganan la partida por muy de buena calidad que sea éste.
La conclusión es que, a igualdad de precios, los Sennheiser Urbanite siguen ganando de calle en cuanto a sonido, pero pierden la batalla del diseño, cuya victoria sigue en manos de Beats y sus Solo 2. Se agradece el toque ligeramente más juvenil de los alemanes, que no dejan de ser todo lo discretos que se podría esperar de la marca, pero es precisamente por esto por lo que no es suficiente para ganarse al público joven que ve además como los americanos mejoran su calidad de sonido, aunque aún tengan mucho camino por recorrer.
Es todo un empate técnico, así que la decisión es tuya: si quieres que tu personalidad también se refleje en tus auriculares y que todo el mundo se fije en ti cuando camines por la calle escuchando tu música, los Beats son tu opción. Mientras que, si prefieres pasar más desapercibido y no sólo escuchar los bajos gordos del hip hop y la EDM, Sennheiser tiene tus auriculares.
Más info: Sennheiser Urbanite | Beats Solo 2
En Xataka | Urbanite, así es como Sennheisser quiere responder a Beats