Creo que hay que ser muy valiente para sacar un fanzine en papel en estos tiempos en los que internet parece acapararlo todo. Javier Bravo lo es y no sólo por eso, es que además lo ha llamado Jo, tía! y su contenido es de lo más bizarro.
Él lo califica como el primer fanzine de teenage exploitation, yo sólo sé que sus dos primeros números dedicados a Tokio ya están en la calle y dan muchas ganas de salir corriendo al kiosco y soltar un Jo, tía! y rezar porque ningún conocido te pille saliendo de la tienda con la revista en la mano. Qué palo, ¿no? Casi mejor que me los pillo online.
Cada volumen cuesta 12 euros, tiene más de 300 páginas y de regalo un CD, el primero de música japo antigua y el número dos de música moderna. En su web puedes echar un vistazo a su interior, muy en la onda del Mondo Brutto. Llámame friki y todo lo que quieras pero el Jo, tía! es una joyita.