Secretos a voces: eso es lo que parecen últimamente los lanzamientos de cada nuevo producto de Apple. Desde que las necesidades de producción de los de la manzana se han desbordado y están en manos de mega fabricantes chinos no hay manera de contener las filtraciones ni el interés de los millones de seguidores y fans de la marca claro... Sin demanda no hay oferta.
Por eso, cada vez que Apple anuncia una nueva keynote, seguimos con los gusanillos de la curiosidad ahí, en nuestro interior, aunque casi todos sabemos que ya conocemos lo que se va a presentar y, como mucho, nos lo negamos a nosotros mismos.
Hoy, día elegido por Apple para una nueva keynote en la que presentar sus iPhones y la nueva versión de iOS, la 7, ha vuelto a ocurrir, y, salvo algunas características internas que no habían trascendido antes, ya conocíamos a grandes rasgos lo que íbamos a poder ver en ella.
En resumen, el ya conocido iOS 7, una nueva iteración del sistema operativo móvil de Apple que dota de nuevas y esperadas funcionalidades a sus teléfonos, tablets, iPods y Apple TV, como los muy demandados por los usuarios Centro de Control, y nueva multitarea, y sobre todo un rediseño de pies a cabeza que dota, entre otras cosas de mucho color las pantallas de nuestros dispositivos y que lo hará a partir del próximo día 18 de septiembre.
Pero eso es lo que menos preocupaba hoy a los incondicionales de la manzana y, por supuesto, a la competencia. Hoy los verdaderos protagonistas eran el iPhone 5C, el rumoreado "iPhone de bajo coste", y el iPhone 5S, la nueva entrega del teléfono inteligente tope de gama (ahora sí que sí) de Apple.
Lo dicho; se cumple casi todo lo esperado con este nuevo terminal de Apple que pretende servir a la marca para llegar a jóvenes con menor poder adquisitivo y a mercados emergentes que hasta ahora le permanecían vedados por sus prohibitivos precios.
Lo más llamativo de este nuevo terminal es, por supuesto su carcasa trasera de policarbonato. Vuelve así el plástico a los iPhone y lo hace ahora en más colores que nunca. Cinco en total: verde, azul, amarillo, rosa y blanco.
Estos colores, además van completamente a juego con la pantalla, que, con un sólo toque en el Centro de Control se adapta bien al color de nuestro fondo de pantalla o al de nuestro iPhone. Y también al de la correspondiente funda oficial que, como ya ocurriera en su momento con los bumpers Apple ha creado para ajustarse a su dispositivo y lucir con ella todas sus características. Esta vez, el material elegido es la silicona, repleta de agujeros circulares en la parte trasera para lucir y combinar con el color elegido.
La pantalla es de 4 pulgadas, o lo que es lo mismo, el 5C mantiene el tamaño del iPhone 5. En su interior encontramos un chip A6, el mismo que en el actual iPhone 5, así que este nuevo terminal viene preparado para no quedarse obsoleto en un suspiro y con capacidad para mover perfectamente aplicaciones y vídeos sin despeinarse.
La cámara también sigue siendo la misma, la iSight de 8 Mpx, con una apertura de F2,4, capaz de grabar vídeo en 1080p a 30 fps e incluso de tomar fotos mientras graba vídeo.
En líneas generales, estamos ante un iPhone 5 completamente idéntico, con todas las funcionalidades de este y cuya única diferencia notable es su carcasa trasera y una batería de mayor duración. Los únicos rumores que parecen no confirmarse son los del recorte de capacidades frente a otros modelos para abaratar el coste, y eso es de agradecer.
El iPhone 5C se presenta en dos capacidades, 16 y 32 Gbs, la de 64 queda en exclusiva para el 5S, a falta de saber qué va a hacer Apple con el modelo existente, sí lo va a mantener en el mercada, si lo hará recortando memoria o sí lo elimina por completo para no solapar dos modelos casi idénticos.
Los precios para Estados Unidos, (por ahora toda una incógnita para España), se han dejado caer en la keynote, siendo de 99 dólares para el de 16 Gb y de 199 para el de 32, siempre con un contrato de dos años con el operador de turno. Aquí podemos esperarlo a unos precios similares a los que tenía hasta ayer el iPhone 4S, rondando los 559 euros. Ahora, este acaba de bajar su precio hasta los 399, por lo que todo parece indicar que el iPhone 5 desaparece, ocupando el 5C en su lugar a esos precios que os comentaba y dejando el escalón superior para el 5S.
Por último, la disponibilidad para España está aún por confirmar, aunque es muy posible que se vaya hasta diciembre, quedando el primer lanzamiento para países como Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia o Australia entre otros en el día 20 de septiembre.
En Trendencias Lifestyle | iPhone 5S, el iPhone para el que quiere más | Sony Xperia Z1, llega el momento de preparar nuestros bolsillos Más información | Apple