La serie de esculturas efímeras Clourant de Cassandra Warner y Jeremy Floto son una cuarta parte escultura, pintura, performance y fotografía. En ellas se exploran los paisajes naturales súbitamente interrumpidos por unos manchones de pintura de colores.
Para ello el dúo artístico ha elegido el paisaje árido del norte de Nevada, EE. UU., como escenario, en el que se han llevado a cabo estos eventos escultóricos flotantes; han capturado la belleza de estos momentos fugaces en la que los líquidos pigmentados han sido lanzados al aire.
Las imágenes se disparan con un obturador de alta velocidad para congelar la imagen, contemplado como si de un grafiti se tratara, una acción rápida y espontánea que no requiere de retoques ni revisiones, la serie Clourant se presenta tal cual, sin ningún retoque.
La idea es buena e ingeniosa pero a pesar de ello el resultado no me termina de convencer, es soso y abrupto, el contraste entre la naturaleza orgánica y expresiva y el color brillante, plano y plástico no funciona, ni se integran ni se agreden.
Se queda a medio camino, puede que si le faltara un poco de Photoshop, jugaran con más transparencias para una integración más fluida y natural el resultado fuera más armonioso. Además las fotos en si y los paisajes no son nada del otro mundo, ni feos, ni sórdidos, ni hermosos o espectaculares. Aunque tan solo es mi opinión, ¿a ti, qué te parecen?
Vía | Maria Victrix Más información | Warner + Floto En Trendencias Lifestyle | Sorprendente erupción de un volcán en Costa Rica que expulsa pétalos de rosa en vez de lava